Las mascarillas han generado una incertidumbre de uso, aún latente, a lo largo de esta etapa del covid-19. ¿Debo usar la mascarilla?, ¿qué mascarilla es la que más me protege?, ¿dónde puedo conseguir una?

Tras anunciar el Ministerio de Sanidad la recomendación del uso de mascarillas a toda la población, estas se convertirán en una parte más de nuestro cuerpo. Según los datos de la Federación de Distribuidores Farmacéuticos, las peticiones de mascarillas en las farmacias españolas se han incrementado un 20.000% respecto al año anterior. Un material para prevenir los contagios se ha convertido en un bien tan escaso como preciado.

Tipos y Función

Existen diferentes tipos de mascarillas y cada una con su función y eficacia, pero ¿sirven para evitar el contagio?  Si sirven, debemos fijarnos en todos los factores que repercuten en su eficacia como: una correcta utilización, el motivo por el que nos protegernos y, obviamente, la calidad de la mascarilla.

Quirúrgicas o caseras

Higiénica desechable

  • NO nos protege
  • Si evita contagiar

 

Quirúrgica desechable

  • NO nos protege
  • SI evita contagiar

Auto filtrantes

FFP1

  • NO nos protege
  • SI evita contagiar
FFP2

  • SI nos protege
  • SI evita contagiar
FFP3

  • SI nos protege
  • NO evita contagiar

Industriales

Semimáscara de filtros

  • SI nos protege
  • NO evita contagiar

Las mascarillas son eficaces a la hora de prevenir contagios, siempre y cuando se utilicen máscaras certificadas: FFP1 (baja protección), FFP2 (media protección) y FFP3 (alta protección).

Recuerda: las mascarillas quirúrgicas o caseras no son válidas para proteger frente al virus.

Cuándo hacer uso de las mascarillas

Como motivo del comienzo de la desescalada y el factor asintomático del coronavirus, el Ministerio ha recomendado el uso de mascarillas, estemos o no contagiados.

Mientras la OMS advierte de que, si estás sano, solo necesitas llevar mascarilla si vas a atender a alguien de quien se sospeche la infección por el covid-19, y en el caso de tener tos o estornudos o creer que puedes estar infectado, utilizarla para evitar la propagación de las gotitas.

Aunque su uso no es obligatorio, se recomienda el uso generalizado de mascarillas higiénicas cuando se viaja en lugares públicos o puntos de concentración de varias personas (trabajo, supermercado, bancos…). Una vez allí, no se considera necesario usarla si el  trabajo no lo requiere y se puede mantener la debida distancia interpersonal. 

Cómo desinfectar la mascarilla

Ante el desabastecimiento y la necesidad de mascarillas, el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social ha publicado una guía para desinfectar las mascarillas y poder reutilizarlas

Siempre es mejor prevenir que curar y en caso de hacer uso de mascarillas conviene saber si son reutilizables o no. Las quirúrgicas son desechables, es decir, de un solo uso, siendo necesario cambiarlas en cuanto están húmedas. No obstante, estos son los métodos de desinfección:

Lavar las mascarillas con detergente normal y agua a temperatura

Entre 60 y 90º (ciclo normal de lavadora). Después lavar con agua y jabón y aclarar bien para eliminar cualquier resto de lejía y dejar secar.

Sumergir las mascarillas en una disolución de lejía

20 ml de lejía, 980 ml de agua tibia durante 30 minutos y lavar, posteriormente, con agua y jabón y aclarar para eliminar cualquier resto de lejía.

Calentar la mascarilla en el horno

Durante 30 minutos a 70 grados o en el vapor de agua hirviendo durante 10 minutos.