La lectura es el proceso a través del cual una persona obtiene información de símbolos escritos, ya sean letras, caracteres o palabras. Aunque normalmente este lenguaje es visual, también puede ser táctil, por ejemplo, el sistema braille. También pueden no estar basados en el lenguaje como tal, como pueden ser la notación o los pictogramas.
La lectura es una capacidad muy importante para la comunicación, la educación… Los trastornos de la lectura se dan cuando una persona tiene problemas para leer o comprender lo que lee.
¿Cómo funciona la lectura?
El proceso de lectura pasa por diferentes fases, que según Julio Alvarado son:
- Fase de reconocimiento: previa a la lectura como tal. Es la identificación y reconocimiento de los símbolos que componen el texto.
- Asimilación: en esta etapa se pasa de la recepción de la palabra por el ojo, a la recepción de esta palabra por el cerebro como un estímulo nervioso.
- Intraintegración: la persona asocia y organiza los símbolos y les asigna un significado.
- Extraintegración: en este momento, el lector asocia su experiencia previa con lo que está leyendo y le da un nuevo significado.
- Retención: la información recibida en la lectura del texto se almacena en el cerebro. Este almacenamiento se acompaña de datos relevantes para la persona, de tal modo que se fije y pueda ser recordada.
- Recuerdo: la información recibida se ha almacenado correctamente y se puede acceder a ella cuando se quiera.
- Comunicación: la persona estructura su propia y resumida versión de la historia y la puede compartir, ya sea por razones académicas o recreativas.
En cuanto al funcionamiento de este proceso, entran en juego 3 variables: la fisiología, la psicología y la pedagogía.
- La fisiología es lo que permite comprender la capacidad humana de leer desde el punto de vista biológico, gracias al estudio del ojo humano, el campo de visión y la capacidad de dejar fija la vista en un punto.
- La psicología es lo que ayuda a definir el proceso psicológico que se lleva a cabo durante las diferentes fases de la lectura.
- La pedagogía clínica se ocupa de los aspectos educativos en cuanto al proceso de enseñanza-aprendizaje de lectura y escritura.
¿Qué son los trastornos de la lectura?
Se dan cuando una persona tiene problemas para leer palabras o comprender lo que lee. La mayoría de trastornos de la lectura se deben a diferencias específicas en la manera en que el cerebro procesa símbolos, palabras y textos escritos.
Las personas que tienen estos trastornos, además de tener problemas para reconocer palabras que ya conocen, suelen tener mala ortografía. Aunque no todas las personas que tienen un trastorno de lectura tienen todos los síntomas.
Es muy importante saber que los trastornos de lectura no son un tipo de trastorno intelectual o del desarrollo, y que no son signo de poca inteligencia o falta de voluntad en el aprendizaje.
Dos de los más conocidos son la dislexia y la hiperlexia.
- La dislexia es el más conocido, y afecta específicamente a la capacidad de lectura de una persona, pudiendo tener dificultad para leer con fluidez y sin errores. También pueden tener dificultades con la comprensión lectora, la ortografía y la escritura. Sin embargo, no tienen problemas para entender un texto cuando otras personas lo leen.
- La hiperlexia es un trastorno en el que las personas que lo padecen, a pesar de tener habilidades de lectura avanzadas, tienen dificultades para entender lo que leen o se habla en voz alta, además de problemas cognitivos o sociales.
¿Cómo se diagnostican estos trastornos?
Trastornos como la dislexia afectan a las personas de diferentes maneras, por ello los síntomas pueden variar. Una señal clave de la dislexia es la dificultad para decodificar palabras, es decir, la dificultad para conectar las palabras con los sonidos que producen. Los niños también pueden tener dificultad con una habilidad básica llamada conciencia fonémica, es decir, la capacidad para reconocer los sonidos de las palabras. Estos problemas pueden aparecer a una edad temprana.
Además, algunas de las señales pueden tener que ver con las emociones y la conducta. Las personas con trastornos de lectura pueden evitar leer, tanto en voz alta como en silencio, o sentirse frustrados o ansiosos al leer. Estas conductas pueden aparecer incluso cuando se domina lo básico para leer.
No solo afectan al aprendizaje, también pueden afectar a actividades diarias como la socialización, la memoria o la gestión del estrés.
Sabías qué…
Algunos expertos creen que entre el 5% y el 10% de la población tiene dislexia, y otros afirman que el 17% de las personas muestran señales de problemas con la lectura.