Una complicación del coronavirus en niños menores de 5 años que puede acabar derivando en una rara afección conocida como enfermedad de Kawasaki.

La enfermedad de Kawasaki es un tipo de vasculitis aguda, es decir es una enfermedad que causa inflamación de los vasos sanguíneos impidiendo que llegue el flujo de sangre al corazón. Puede llegar a provocar lesiones en venas y arterias, erupciones en la piel y fiebre. Pero sin duda la principal y más temida complicación es la formación de aneurismas en las arterias coronarias del corazón, lo que puede derivar en muerte súbita.

Es una afección poco común que involucra inflamación de los vasos sanguíneos. La edad promedio de presentación de la enfermedad de Kawasaki es entre los tres meses y los 5 años de edad (80 a 90% de los casos). Aunque hay casos en todos los países y en todas las etnias, esta forma de vasculitis es mucho más común en niños de origen asiático, principalmente en japoneses.

Causas

El origen de la enfermedad de Kawasaki sigue siendo desconocido, aunque los científicos ya descartan que sea una enfermedad contagiosa de persona a persona.

La genética puede tener un importante rol en esta enfermedad, pero también puede tratarse de un trastorno autoinmunitario alterado por factores ambientales, como infecciones. Como principal hipótesis aparece un agente infeccioso, sea un virus o una bacteria, que puede activar el sistema inmunológico de niños genéticamente predispuestos, desencadenando una reacción autoinmune contra los vasos sanguíneos.

Síntomas

La fiebre aparece de forma abrupta, aunque pueden existir algunos síntomas del síndrome de Kawasaki leves los días previos, tales como irritabilidad, vómitos, debilidad, o dolor articular. El cuadro clínico de la enfermedad se divide en 3 fases

Fase aguda

Comienza de forma repentina con fiebre alta (39-40ºC), que puede durar varias semanas y que no responde a antitérmicos ni a antibióticos. Además de fiebre, en esta fase pueden aparecer otros síntomas y signos como:

  • Erupción en la zona genital.
  • Enrojecimiento y tumefacción de manos y pies.
  • Ojos extremadamente rojos sin una secreción espesa.
  • Ganglios linfáticos inflamados en el cuello y tal vez en otra parte.
  • Lengua extremadamente roja con hinchazón de las papilas gustativas.
  • Inflamación del músculo cardiaco (miocarditis) o inflamación de la membrana que rodea al corazón (pericarditis).

En el 75% de los casos hay un aumento de los ganglios en el cuello que se palpan como nódulos. Los síntomas en la piel y los ganglios son muy evidentes en esta fase aguda, pero pueden persistir en el resto de las fases.

Fase subaguda

Esta fase da comienzo cuando desciende la fiebre y que puede llegar a durar varias semanas. Los signos y síntomas iniciados en la fase aguda, tales como vómitos, diarrea e irritabilidad, todavía pueden estar presentes en esta fase. Pero sin duda se caracteriza por:

  • Dolor articular y abdominal.
  • Aumento de plaquetas, células que facilitan la coagulación.
  • Desarrollo de aneurismas en las arterias coronarias inflamadas.
  • Descamación de la piel de las manos y de los pies en forma de láminas grandes.

La no desaparición de la fiebre después de 2 semanas suele ser un signo de mal pronóstico, ya que está más asociado con complicaciones cardíacas. En esta fase el riesgo de muerte súbita es elevado debido a la formación de trombos que obstruyen las arterias coronarias y dan lugar a un infarto agudo de miocardio.

Fase de convalecencia

En la tercera fase de la enfermedad, los signos y síntomas desaparecen lentamente, a menos que se manifiesten complicaciones. Es posible que transcurran hasta ocho semanas antes de que volver a sentir fuerzas y energía a niveles normales. Durante esta etapa, pueden surgir surcos transversales en las uñas, llamadas líneas de Beau.

Tratamiento

El tratamiento temprano es esencial para reducir el riesgo de complicaciones. Los niños con la enfermedad de Kawasaki necesitan tratamiento hospitalario de iniciación inmediata para prevenir el daño a las arterias coronarias y al corazón.

La principal medida terapéutica consiste en administrar inmunoglobulina intravenosa en dosis altas como una única infusión. El estado del niño a menudo mejora mucho al cabo de 24 horas de tratamiento.

Incluso con el tratamiento estándar, 1 de cada 4 niños puede desarrollar problemas en las arterias coronarias. Aunque la mayoría de los niños se recupera por completo cuando la enfermedad se detecta y se trata a tiempo, aproximadamente el 2% de los niños fallece por problemas cardíacos causados por la enfermedad.

Sabías que ...

 

  • Afecta más a los niños que a las niñas.
  • Es más frecuente en niños de origen japones.
  • El 25% de los niños no tratados desarrollan secuelas cardíacas.
  • En Europa solo se dan de 10 a 20 casos por cada 100.000 niños, mientras que, en Japón, ascienden a 250 casos.